Análisis nostálgico - Final Fantasy IX

Con Final Fantasy IX llegaría a su final el lanzamiento de la saga Final Fantasy en PSX, tras dos entregas excelentes. Pero FFIX llegó como una desedida a lo grande de la consola, y nunca mejor dicho, ya que nos encontramos ante uno de los mejores RPG de la historia y ante el que podría ser perfectamente el mejor Final Fantasy de la saga, ya que es un juego que respira elementos de FF por los cuatro costados. A continuación, analizo este magnífico videojuego.

Historia

Final Fantasy IX cuenta con una historia sensacional. En Alexandria se va a celebrar el 16º cumpleaños de la princesa Garnet, hija de la reina Brahne. Para ello, se ha contratado una banda teatral llamada Tantalus que van a representar la obra "Quiero ser tu canario". Pero durante la obra se descubren los verdaderos planes de la banda: el secuestro de la Princesa. A partir de este momento, Yitán (uno de los miembros de Tantalus), Garnet, Vivi (un pequeño mago ngro que pasaba por allí), Steiner (el capitán del Batallón Pluto del castillo de Alexnadria dispuesto a proteger a la Princesa) y muchos personajes más tendrán que evitar a los esbirros de la reina Brahne, enviados por ella a recuperar a toda costa a su hija. Pero poco a poco se irá descubriendo que hay una razón muy poderosa por la cual Brahne desea con tanta ffuerza que regrese Garnet, más allá de que sea su hija, y realizará actos muy crueles.

Detrás de esta aparente historia de secuestro de princesa, intento de recuperarla por la reina y reina mala descubriremos una compleja historia sobre el sentido de la vida, sobre la amistad, sobre los recuerdos y sobre salvar el mundo. Final Fantasy IX es una obra llena de filosofía, algo que no solo se verá en el argumento, sino también en los diálogos de los personajes. Y es que FFIX destaca especialmente por los diálogos de los personajes, que son brillantes, llenos de magia, filosfía, humor e intriga. A través de ellos conoceremos la personalidad de los personaje, muy compleja en su mayoría, y que se caracteriza porque cada personaje tiene una serie de dudas que les hacen sentirse mal. Estas conversaciones vendrán muy bien integradas en el argumento, especialmente a través del innovador sistema STA (Secuencias en Tiempo Activo), un sistema mediante el cual, en ciertos momentos, al pulsar el botón Select, podremos ver escenas que pasan al mismo tiempo que jugamos en lugares diferentes. Conoceremos a personajes muy memorables, y quedaos con el personaje de Vivi, sin duda alguna el mejor personaje de un RPG.
Así pues, puede parecer que FFIX cuenta con un argumento tópico, infantil y poco interesante, pero nada más lejos de la realidad, ya que es más original que el de FFVII y por momentos incluso más complejo que este. Cabe desacar que aparecen pequeños detalles importantes para el argumento que son un homenaje a anteriores Final Fantasy, algo muy interesante.

Gráficos

Final Fantasy IX es un juego que entra por los ojos. Tras los personajes en tamaño real de la octava entrega, volveremos a encontrarnos con personajes super-deformed, con cabezones y cuerpos pequeñitos. Pero están tan bien hechos, tienen tantos detalles, que nos encontraremos con muchas expresiones diferentes en ellos. Mención especial tienen los escenarios, que rebosan de magia y saber hacer. Recorreremos escenarios prerenderizados, al estilo de los FF de PSX, pero aún más detallados si cabe. Mención especial a Treno, Lindblum o Alexandria.

Pero lo más destacable son las CGI, que alcanzan un nivel de calidad altísimo, y son todas espectaculares, habiendo unas cuantas que pasarán a la historia, como la del final del CD3. FFIX lleva al límite la potencia gráfica de PlayStation y esto es algo que se ve desde el segundo 1 del juego. Un problema es que los gráficos pueden parecer infantiles y que el juego parezca eso, infantil, pero las apariencias engañan.

Música y sonido

Llegamos a otro apartado sobresaliente del juego, y sin duda alguna. Final Fantasy IX posee, con toda seguridad, la mejor BSO de un RPG y una de las mejores de un videojuego. Todas las músicas son excelentes, y es que Nobuo Uematsu se ha superado a sí mismo, confirmando él mismo que hizo su mejor trabajo en este juego. Oiremos músicas espectaculares como Dark Messenger o la famosísima You're Not Alone!
Por otro lado, los efectos de sonido siguen la estela de los anteriores FF, es decir, sobresalientes. Lo mejor es que, al igual que en el argumento, escucharemos melodías de otros FF, algo muy de agradecer. En resumen, la BSO se adecúa perfectamente a cada momento y nos hará emocionarnos más de una vez, tendlo por seguro.

Jugabilidad

Final Fantasy IX fue concebido desde el primer momento como un FF a la antigua escuela, y esto no es malo para nada.
Comenzaremos por los combates, que vuelven a utilizar cuatro personajes en lugar de los tres que nos tenían acostumbrados los FFVII y VIII. Los combates son muy muy simples, pero a la vez muy estratégicos: estos se basan en su mayor parte en el tradicional BTA (Batalla en Tiempo activo) que tan famoso se hizo con FFIV. La gran novedad son los Trance, un estado especial de los personajes en el cuál se hacen más fuertes y pueden usar ataques especiales. Se accede a este estado cuando una barra naranja se llena por completo al atacar o recibir ataques enemigos. Lo criticable del Trance es que una vez que la barra se llena éste salta automáticamente, sin opción a usarlo manualmente, y muchas veces lo malgastaremos en combates normales, pues no se mantiene entre combate y combate. En genreal, los combates de FFIX siguen la estela de los FF de SNES. Incluso se usarán los trabajos, pero estos serán fijos de cada personaje, no se podrán cambiar.
Se subirán niveles de forma tradicional y, al mismo tiempo, al ganar puntos de Experiencia, ganaremos PH (Puntos de Habilidad). ¿Y esto que es? Pues unos puntos que gastaremos para desarrollar a los personajes. El sistema de desarrollo de FFIX se centra en las habilidades. Estas habilidades están incluidas en armas y armaduras, y están representadas por una barra. Cuando esta barra llegue el máximo (consiguiendo PH) conseguiremos esa habilidad y, lo mejor, podremos usar esa habilidad sin necesidad de tener quipado el arma o armadura en la que estaba incluida la habilidad. Mientras no se llene deberemos equiparla para usar la habilidad. Cabe comentar que no todas las habilidades pueden ser usadas por todos, algo que le da más complejidad al sistema. Pero esto no es todo. Cuando queramos usar la habilidad, ésta debe ser equipada. Para ello utilizaremos unos cristales: para equiparnos la habilidad habrá que usar una cantidad determinada de cristales y, si no la queremos equipar, basta con quitar los cristales. El problema es que hay un número limitado de cristales, que va aumentando al subir de nivel.

Como veis, tanto el sistema de combate como el de desarrollo de FFIX es muy simple, pero es tremendamente adictivo. El aspecto negativo de FFIX es que es muy fácil, yo diría que el más fácil de la saga (exceptuando el X-2). Pero esto no supone un gran problema, ya que el juego es tan divertido que eso apenas se nota. Y el juego es tan divertido porque hay una elevadísima cantidad de minijuegos y misiones secundarias. Todas estas misiones son originales y muy adictivas, destacando la larga misión secundaria de los Chocobos, la de los Moguris o la de los Stellazios. Como minijuegos el más destacable es el ya conocido juego de cartas de FFVIII, que vuelve transformado y muy mejorado, pero pierde importancia.

Por último, caben destacar esos pequeños detalles ya comentados que proceden de anteriores Final Fantasy, además de la gran cantidad de pequeños detalles de mucho interés presentes en el juego. En resumen, nos encontraremos con un juego largo (aunque no tan largo como el FFVIII), que nos llevará unas 55 horas completarlo sin cosas opcionales y más de 70 horas completarlo al 100% dividido en 4CDs.

Final Fantasy IX no decepciona, más bien al contrario, y aparece como el mejor juego de la saga, el más emotivo, el más espiritual, el más filosófico y el más jocoso de la saga. Ya sabéis, si jugais al FFIX no os podréis separar de él, tendlo por seguro.

Lo mejor
-Argumento muy interesante
-Muchas misiones secundarias y minijuegos
-Los personajes
-La perfecta conexión entre escenas
-La BSO
-Los gráficos
-Los homenajes a anteriores FF
-La magia que se respira

Lo peor
-Puede ser muy fácil
-Que no hayan más jeugos así

Nota: 9'7